Es una danza femenina y vestida de atuendos de nutrido color conducidos y vigilados socialmente por el negro personaje masculino único del conjunto.
Danza procedente de Angasmarca.
Es una danza que dramatiza la historia de un señor de apellido Quishpi quién se había enamorado de la hija del rey , el Rey se entero y mando a hechizar al enamorado de su hija convirtiéndolo en cóndor .
El cóndor rey de las alturas es el animal más fuerte, pues resiste la soledad y el clima de las alturas pero cuando la tristeza se apodera de el, entona un canto melancólico, advirtiendo su partida al más halla.
La historia cuenta que el Quishpi cóndor debe bailar antes que el lucero del amanecer aparezca, caso contrario lo podría causar la muerte.
La danza se presenta generalmente en la fiesta de Julio para rendir homenaje al Apóstol Santiago “El Mayor”.
El Quishpi Cóndor viste tocado de plumas de cóndor o de halcón en la espalda lleva plumas que asemejan a las de un cóndor, calza llanques, pañuelos blancos que los hace florear cuando baila, el jalador viste un sombrero negro, poncho corto alforja al hombro, llanques o zapatos, lleva una pelota hecha de trapo “ovillo de brujo” y que lo hace rodar con una cuerda para que el Quishpi Cóndor baile; lo integran hombres. El Quishpi Cóndor, el brujo, o jalador y el cajero.
Delante al jalador jala el ovilló para que el Quishpi Cóndor lo siga por todo el campo que está ocupado.